Desde el pasado día 12 de junio está en nuestras tiendas Prototype. Desarrollado por los chicos de Radical Entertainment y publicado por Activision, el juego nos pone en la piel de Alex Mercer, un extraño personaje infectado por un virus, sin recuerdos, y con una única misión: averiguar la verdad sobre nuestro protagonista y el porqué de haberse convertido en un mutante.
Para tal fin, Alex tendrá a su entera disposición la isla de Manhattan, la cual podrá recorrer de arriba abajo y de izquierda a derecha. Junto a esta libertad, contaremos con una serie de poderes y habilidades que nos facilitarán un poco la tarea. Eso sí, al principio iremos casi desnudos en este sentido y poco a poco iremos ganando puntos de experiencia para ir adquiriendo nuevos poderes o habilidades, o potenciar los que ya tenemos. Los PE los iremos adquiriendo al completar misiones, al absorber enemigos o completando los retos secundarios que se nos irán presentando. Son bastantes los aspectos que nos recuerdan a Crackdown, juego del cual se ha nutrido bastante… al menos en mi opinión.
Debo reconocer que, tras una primera fase llena de acción y con un Alex Mercer en todo su esplendor, el juego nos sitúa al comienzo de la historia y nos deja con un Alex muy básico y sin apenas gracia. Es un poco decepcionante pero no os equivoquéis: tras superar unas cuantas misiones, absorber a unos cuantos enemigos y poco más, iremos adquiriendo habilidades y poderes que nos harán disfrutar de lo lindo. Prototype es algo así como una buena pieza de música clásica en la que el tono habitual es “in crescendo”. Tras un par de horas de juego seremos capaces de pegar supersaltos, mutilar a nuestros enemigos, realizar combos, planear por la ciudad, coger a nuestros enemigos o viandantes a la carrera y estamparlos contra lo que nos apetezca… Prototype en este sentido parece no tener límites.
Es cierto que quizás la historia, contada de manera desordenada y poco clara a lo largo del juego, no acabe por engancharnos demasiado ni quedarnos muy clara, pero eso da igual en Prototype: el juego, aún con este punto negro de la historia, no pierde interés en ningún momento. Además, ante cada misión siempre tenemos distintas formas de afrontarlas, por lo cual la diversidad y la diversión está más que garantizada: podemos bien optar por meternos de lleno en la boca del lobo y acabar con todo bicho viviente, podemos convertirnos en maestros del sigilo y que nadie se entere de que estamos allí… o bien podemos hacernos con un vehículo del ejercito (ya sea tanque o helicóptero) y arrasar también con todo lo que tengamos delante.
Una de las habilidades que más me ha llamado la atención de Prototype es la habilidad que tiene el protagonista de absorber a cualquier personaje que haya en pantalla y convertirse en él. Me explico: podemos por ejemplo absorber a un comandante del ejército y, tras convertirnos en él, colarnos en la base militar sin que nadie se percate de nuestra presencia. Esta habilidad también nos sirve para eludir a nuestros enemigos, ya que una vez nos descubran nos perseguirán hasta que, o bien los perdamos de vista, nos transformemos en “alguien” y pasemos desapercibidos, o bien acabemos con ellos.
Cabe destacar que en medio de nuestra historia y misiones, tenemos por un lado al ejército con sus cuarteles generales, bases y demás, y por otro a los infectados del virus, con sus colmenas. Es todo un gusto como se baten en duelo el ejército y los infectados, mientras nosotros nos situamos en lo alto de un edificio y contemplamos la masacre. Es toda una gozada el contemplarlo, sabiendo además que ambos son nuestros enemigos y que no dudarán ni un segundo en acabar con nosotros a la primera de cambio.
Las misiones principales de la historia son bastante variadas y entretenidas, no pudiendo decir lo mismo sobre las secundarias: estas se convierten en algo repetitivo y bastante aburridas a la larga. Aún así, serán necesarias para conseguir más PE y desarrollar más las habilidades y poderes de Alex. De las pruebas secundarias las que más me gustan son las del tipo “masacre”, en las cuales tendremos que acabar con el mayor número de enemigos posibles en un tiempo limitado.
Gráficamente el juego no es que sea un ejemplo de un trabajo excelente, pero cumple su papel. Eso sí, se nota bastante que han sacrificado este aspecto para representar una ciudad llena de vida con muchos elementos en pantalla. Añadiré también que los enemigos son bastante repetitivos, teniéndonos que enfrentar siempre a los mismos. Las animaciones de Alex Mercer son de una GRAN calidad, notando bastante la diferencia entre él y el resto de personajes del juego.
En cuanto al tema sonoro, decir que me ha decepcionado bastante. Hay momentos en los cuales se echa de menos algo más de contundencia en lo temas y una mayor variedad y calidad de los existentes. Además, podían haberlo doblado a nuestro idioma, que no cuesta tanto y siempre es de agradecer.
El juego, y ya casi para terminar, consta de 31 misiones principales, las cuales no nos llevarán mucho más de 10 horas. Quizás se trate de una duración no muy larga, pero para eso están las misiones secundarias y el resto de secretos del juego: si “perdemos” el tiempo con esto último, podremos tirarnos horas y horas de juego, hasta completarlo en su totalidad. Por desgracia, y por si esto te parece poco, el juego no soporta ningún modo online ni cooperativo ni nada de nada, lo cual, y no me cansaré de repetirlo, me parece un atraso en los tiempos que corren.
Afortunadamente, Prototype es un juego divertido, que entretiene, y que te invita a jugar hasta ver dónde llega el poder de Alex Mercer y descubrir qué es lo que le ha pasado. La dificultad del juego es bastante ajustada y no hará que caigamos en la desesperación en ningún momento. Y si ponemos en una balanza todas sus cualidades, buenas y malas, creo que se inclina de manera sobrada hacia el lado de las buenas. Yo que vosotros le daría una oportunidad, si os gusta este tipo de juegos, y me echaría unas partidas. No creo que os decepcione… os va a gustar!!!
Lo Mejor:
Para tal fin, Alex tendrá a su entera disposición la isla de Manhattan, la cual podrá recorrer de arriba abajo y de izquierda a derecha. Junto a esta libertad, contaremos con una serie de poderes y habilidades que nos facilitarán un poco la tarea. Eso sí, al principio iremos casi desnudos en este sentido y poco a poco iremos ganando puntos de experiencia para ir adquiriendo nuevos poderes o habilidades, o potenciar los que ya tenemos. Los PE los iremos adquiriendo al completar misiones, al absorber enemigos o completando los retos secundarios que se nos irán presentando. Son bastantes los aspectos que nos recuerdan a Crackdown, juego del cual se ha nutrido bastante… al menos en mi opinión.
Debo reconocer que, tras una primera fase llena de acción y con un Alex Mercer en todo su esplendor, el juego nos sitúa al comienzo de la historia y nos deja con un Alex muy básico y sin apenas gracia. Es un poco decepcionante pero no os equivoquéis: tras superar unas cuantas misiones, absorber a unos cuantos enemigos y poco más, iremos adquiriendo habilidades y poderes que nos harán disfrutar de lo lindo. Prototype es algo así como una buena pieza de música clásica en la que el tono habitual es “in crescendo”. Tras un par de horas de juego seremos capaces de pegar supersaltos, mutilar a nuestros enemigos, realizar combos, planear por la ciudad, coger a nuestros enemigos o viandantes a la carrera y estamparlos contra lo que nos apetezca… Prototype en este sentido parece no tener límites.
Es cierto que quizás la historia, contada de manera desordenada y poco clara a lo largo del juego, no acabe por engancharnos demasiado ni quedarnos muy clara, pero eso da igual en Prototype: el juego, aún con este punto negro de la historia, no pierde interés en ningún momento. Además, ante cada misión siempre tenemos distintas formas de afrontarlas, por lo cual la diversidad y la diversión está más que garantizada: podemos bien optar por meternos de lleno en la boca del lobo y acabar con todo bicho viviente, podemos convertirnos en maestros del sigilo y que nadie se entere de que estamos allí… o bien podemos hacernos con un vehículo del ejercito (ya sea tanque o helicóptero) y arrasar también con todo lo que tengamos delante.
Una de las habilidades que más me ha llamado la atención de Prototype es la habilidad que tiene el protagonista de absorber a cualquier personaje que haya en pantalla y convertirse en él. Me explico: podemos por ejemplo absorber a un comandante del ejército y, tras convertirnos en él, colarnos en la base militar sin que nadie se percate de nuestra presencia. Esta habilidad también nos sirve para eludir a nuestros enemigos, ya que una vez nos descubran nos perseguirán hasta que, o bien los perdamos de vista, nos transformemos en “alguien” y pasemos desapercibidos, o bien acabemos con ellos.
Cabe destacar que en medio de nuestra historia y misiones, tenemos por un lado al ejército con sus cuarteles generales, bases y demás, y por otro a los infectados del virus, con sus colmenas. Es todo un gusto como se baten en duelo el ejército y los infectados, mientras nosotros nos situamos en lo alto de un edificio y contemplamos la masacre. Es toda una gozada el contemplarlo, sabiendo además que ambos son nuestros enemigos y que no dudarán ni un segundo en acabar con nosotros a la primera de cambio.
Las misiones principales de la historia son bastante variadas y entretenidas, no pudiendo decir lo mismo sobre las secundarias: estas se convierten en algo repetitivo y bastante aburridas a la larga. Aún así, serán necesarias para conseguir más PE y desarrollar más las habilidades y poderes de Alex. De las pruebas secundarias las que más me gustan son las del tipo “masacre”, en las cuales tendremos que acabar con el mayor número de enemigos posibles en un tiempo limitado.
Gráficamente el juego no es que sea un ejemplo de un trabajo excelente, pero cumple su papel. Eso sí, se nota bastante que han sacrificado este aspecto para representar una ciudad llena de vida con muchos elementos en pantalla. Añadiré también que los enemigos son bastante repetitivos, teniéndonos que enfrentar siempre a los mismos. Las animaciones de Alex Mercer son de una GRAN calidad, notando bastante la diferencia entre él y el resto de personajes del juego.
En cuanto al tema sonoro, decir que me ha decepcionado bastante. Hay momentos en los cuales se echa de menos algo más de contundencia en lo temas y una mayor variedad y calidad de los existentes. Además, podían haberlo doblado a nuestro idioma, que no cuesta tanto y siempre es de agradecer.
El juego, y ya casi para terminar, consta de 31 misiones principales, las cuales no nos llevarán mucho más de 10 horas. Quizás se trate de una duración no muy larga, pero para eso están las misiones secundarias y el resto de secretos del juego: si “perdemos” el tiempo con esto último, podremos tirarnos horas y horas de juego, hasta completarlo en su totalidad. Por desgracia, y por si esto te parece poco, el juego no soporta ningún modo online ni cooperativo ni nada de nada, lo cual, y no me cansaré de repetirlo, me parece un atraso en los tiempos que corren.
Afortunadamente, Prototype es un juego divertido, que entretiene, y que te invita a jugar hasta ver dónde llega el poder de Alex Mercer y descubrir qué es lo que le ha pasado. La dificultad del juego es bastante ajustada y no hará que caigamos en la desesperación en ningún momento. Y si ponemos en una balanza todas sus cualidades, buenas y malas, creo que se inclina de manera sobrada hacia el lado de las buenas. Yo que vosotros le daría una oportunidad, si os gusta este tipo de juegos, y me echaría unas partidas. No creo que os decepcione… os va a gustar!!!
Lo Mejor:
- El desarrollo de los poderes y habilidades de Alex Mercer: son una pasada.
- Entretenido y divertido como muy pocos.
- La cantidad de misiones y objetivos disponibles, tanto principales como secundarios.
- La calidad gráfica, que no es todo lo buena que nos hubiese gustado.
- Que el juego no esté doblado, encontrando además deficiencias en los subtítulos.
- La inexistencia de modo online, cooperativo o whatever… no es pedir demasiado creo yo.
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